La técnica Webster optimiza la función pélvica de la madre para el embarazo y parto.
Es un análisis y ajuste quiropráctico específico que reduce el estrés del sistema nervioso, equilibra la alineación de la pelvis al nivel de sus huesos, músculos y ligamentos.
Las causas fisiológicas que participan a crear inestabilidad pélvica durante el embarazo son principalmente la producción de hormonas y las compensaciones del cuerpo con el cambio de gravedad que crean inestabilidad en las articulaciones de la pelvis.
La técnica Webster es generalmente indolora y segura, incluso en etapas finales del embarazo. Puede resultar en partos más cortos —hasta un 25% menos de duración— y disminución de la probabilidad de cesárea además de una mejor recuperación posparto.
Aunque no reemplaza procedimientos médicos establecidos, puede ser una herramienta excelente para promover un parto más cómodo, eficiente y menos intervencionista.
Evaluación pélvica: el quiropráctico analiza la alineación del sacro y las articulaciones sacroilíacas, identifica subluxaciones (desalineaciones) y tensión en músculos y ligamentos pélvicos
Ajuste específico: se realiza un ajuste manual o mediante herramientas (tablas especiales, instrumentación) para realinear la pelvis sin aplicar presión al útero
Trabajo complementario: se relajan los tejidos blandos alrededor del útero (ligamentos, músculos) para liberar tensiones
Durante tu primera consulta realizaremos una evaluación integral de tu salud, incluyendo un análisis detallado de tu postura, movilidad y antecedentes clínicos. A partir de esta valoración, seleccionaremos la técnica quiropráctica más adecuada y segura para tu caso, con el objetivo de brindarte un tratamiento personalizado y efectivo que se adapte a tus necesidades específicas.